

César A. González
Lunes, 29 de enero 2024, 10:01
Por fin el Club Polideportivo Talayuela logró pintar una sonrisa en la cara de los aficionados locales. Desde que a finales de noviembre ganaran a la UP Plasencia no saboreaban un triunfo ante los suyos. Y para ello tocó tirar de épica para remontar un 0-1 al descanso ante un buen Torreorgaz.
Los azules salieron con los habituales Papa en la portería: Fabri, Mauro, Isma y Andrés en defensa; Rafa de pivote, el recién llegado Vespi junto con Onnais, Reguero y Nando en la medular con Boli en la punta.
La primera parte fue para olvidar por parte del equipo de casa, pues los foráneos controlaron los tempos y eso les sirvió para adelantarse en el marcador, 0-1, con el que se llegaría al descanso.
Y ahí llegó la conjura. David Arellano supo dar las instrucciones correctas a sus jugadores y éstos le cambiaron por completo la cara al partido. Dominando, encerrando, jugando, combinando y sumando una llegada tras otra. Fruto de ese dominio, su delantero Boli pudo convertirse en la gran estrella del choque, con dos goles, siendo el segundo de una bella factura superando al portero por alto con una vaselina fuerte y teledirigida a la escuadra.
Así pues, tres puntos vitales para el CP Talayuela que le sirven para respirar y asomarse a un final de liga en el que pueda esquivar la promoción de descenso.
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