Los tabaqueros anuncian nuevas tractoradas en la A-5 y paralizarán la entrega del producto a Cetarsa como protesta por la situación del sector

Así lo acordaron las organizaciones agrarias Asaja Extremadura y UPA-UCE Extremadura, junto a Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura en una asamblea celebrada en la tarde de este miércoles, 10 de noviembre, en la casa de la cultura de Talayuela.

Al acto asistieron más de 300 personas entre las que se encontraban en su mayoría productores de tabaco de toda la región acompañados de alcaldes y concejales de la zona de diferentes signos políticos, representantes de mancomunidades o representantes de empresas relacionadas también con el sector para determinar las medidas a poner en marcha ante la problemática de precios que atraviesan.

La jornada estuvo presidida por Teófilo Moreno e Ignacio Huertas de UPA-UCE Extremadura, Ángel García Blanco de Asaja Extremadura, Juan José Manzanero y Rubén Martín de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura.

Abrió el acto Ismael Bravo, alcalde de Talayuela, mostrando su apoyo al sector y también en representación de los alcaldes de las zonas tabaqueras. «Los alcaldes de la zona iremos de la mano con un sector que es vital para la zona y cuentan con nuestro apoyo para defender y reivindicar su producto».

En la jornada quedó plasmado que Asaja, UPA-UCE y Cooperativas Agroalimentarias Extremadura consideran que los tabaqueros necesitan estabilidad y apuestan por alcanzarla a partir de una garantía de producción, con contratos plurianuales entre productores e industria tabaquera y con unos precios razonables que garanticen el futuro de las explotaciones. Ante la falta de soluciones anuncian nuevas tractoradas en la A-5 y paralizarán la entrega del producto a Cetarsa como protesta por la situación del sector.

Por su parte, durante el acto los representantes de Asaja, UPA-UCE y Cooperativas Agroalimentarias Extremadura informaron a los tabaqueros de las amenazas que sufre el sector centrándose principalmente en tres dificultades; el uso de fitosanitarios, la ley de fraude fiscal y el precio.

«En los últimos años se han prohibido el 70 por ciento del uso de los fitosanitarios y hemos sufrido un aumento del coste de estos productos. La previsión es que se supriman más y sin algunos de ellos es imposible seguir produciendo este cultivo. Los proveedores nos dicen que el precio de los productos subirán entre el 20 y el 30 por ciento dependiendo del producto y estamos cobrando menos que hace diez años», lamentaba Rubén Martín de Cooperativas Agroalimentarias Extremadura.

En cuanto a la nueva ley de fraude fiscal tiene una imposición relativa a la movilidad del tabaco, para los tabaqueros la nueva ley no se ajusta a la realidad y puede acarrear multas innecesarias para los propios tabaqueros al llevar su producto a los centros de procesamiento. «Pequeños errores de peso, o tabaco que no nos acepten en Cetarsa pueden poner al agricultor en riesgo de ser multado. Ya existen diferentes herramientas de control y funcionan, esto sólo traerá problemas», explicaba Juan José Manzanero de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura.

Ignacio Huertas, UPA-UCE Extremadura, comenzó resaltando la importancia de la unión del sector para hacer frente a estas situaciones. «El cultivo del tabaco lleva muchos años amenazado pero cada vez que ha hecho falta los agricultores hemos ido juntos a resolver el problema».

Las ayudas de la PAC representan el 40 por ciento de la renta del agricultor y el 60 por ciento restante lo debe aportar lo que perciben por la producción, algo que ahora mismo no está sucediendo.

«En estas condiciones no se puede garantizar el futuro en un momento que es decisivo, porque los tabaqueros van a tener que adquirir con la nueva PAC compromisos de producción durante varios años (cinco años la misma cantidad en el caso de la producción integrada), y para eso necesitan unos precios que cubran los costes y un compromiso temporal de contratación que no tenemos. No pueden encontrarse con que ellos se comprometan a producir sin que nadie se comprometa a comprarlo y eso es lo que tenemos que exigir a la industria. El precio no cubre el coste de producción y así no podemos garantizar el fututo del sector. La sociedad tiene que saber que la reivindicación del sector tabaquero no termina con la reforma de la PAC, es necesario que suban los precios o no podremos producir», comentaba Huertas.

Para Ángel García Blanco de Asaja Extremadura criticó los trámites a los que tienen que enfrentarse los tabaqueros, la subida de los precios de fertilizantes y combustible, la falta de mano de obra, la nueva reforma laboral que afecta a los contratos temporales o el «maltrato que están sufriendo los tabaqueros en la línea de compra de Cetarsa».

«El director general de Cetarsa, José Antonio González, ha calificado el tabaco de esta temporada como el peor de las últimas cuatro campañas cuando las empresas privadas de compra como Deltafina o Mela nos confirman que es de una gran calidad. Por esto hemos pedido su dimisión. Cetarsa nos ha comunicado que este año ha tenido pérdidas y lo ha querido arreglar bajando el precio a los tabaqueros»

Por todo esto, las organizaciones agrarias junto a los tabaqueros han anunciado nuevas movilizaciones. Por un lado, la próxima semana paralizarán la entrega del producto a Cetarsa tanto en Talayuela como en Navalmoral de la Mata, de lunes a viernes, como protesta por la situación del sector. El lunes por la mañana, también está convocada una concentración a las 12.00 horas en la puerta de Cetarsa Talayuela. Solicitaran diferentes reuniones con la Junta de Extremadura y se solicitará a Delegación de Gobierno los cortes en la A-5 para los próximos días 2 y 3 de diciembre.