«La tormenta ha afectado a casi toda la finca y hay zonas en las que se ha perdido toda la producción»

Agricultor por tradición familiar y pasión por el campo, José Antonio López Bejar, natural de Aldeanueva de la Vera, ha visto como en la tarde de este pasado lunes varias tormentas de granizo se pueden haber llevado por delante el trabajo de todo una campaña. Por el momento, el temporal retrasa todas las labores programadas y quedan pendientes de lo que pueda suceder en el cielo en los próximos días.

José Antonio tiene una finca de 45 hectáreas aproximadamente situada en la Vega del Ribero perteneciente a Jaraíz de la Vera. Su cultivo se centra princ,ipalmente en el tabaco, con 37 hectáreas donde produce unos 105.000 kilos de tabaco y el resto hasta 45 hectáreas cultiva pimiento.

Para muchos cultivadores como José Antonio, que no poseen explotaciones grandes, las lluvias de este pasado lunes pueden acarrear la ruina a estas alturas de la campaña pero no sólo para los tabaqueros sino para las personas que también trabajan en las fincas.

«La tormenta ha afectado a casi toda la finca y hay zonas en las que se ha perdido toda la producción. Muchas plantas se han perdido. La cogolla, que es la zona de la planta donde está el valor del tabaco es como si se hubiese cortado por arriba, las hojas todas llenas de agujeros, volcadas o directamente te las encuentras en el surco. Ha sido un verdadero desastre. Una tormenta como la de ayer trae para todos nosotros mucha incertidumbre porque aunque tenemos seguro no sabemos cómo se va a valorar esto. Tenemos miedo porque la inversión ya está hecha y no sabemos qué sacaremos. Además tenemos cinco personas contratadas en la finca y no sabemos ahora qué pasará con ellos».

Los próximos días se antojan vitales para los cultivadores de la zona, por un lado para intentar salvar el tabaco que se pueda y por otro no dejarán de mirar al cielo ya que se prevén más lluvias para final de la semana, lo que podría ser devastador en una campaña que no ha sido fácil por las temperaturas y la crisis sanitaria.

«No sabemos qué pasará con el tabaco que ha quedado ya que perfectamente puede estropearse al meterlo ahora en los secaderos por el estado en el que está. En estos momentos si llega otra tormenta como esta a finales de semana nos remata. Está siendo una campaña muy difícil, estresante. Hubo complicaciones al comienzo de campaña en las posturas por el clima y ha sido una campaña dura de hierba y de trabajo. Además, llegó la crisis sanitaria que nos ha obligado a trabajar con mascarilla en el campo y ahora tormentas. Otra como esta nos remata. Como dicen los mayores, año bisiesto no trae nada bueno».